Ojos tristes que demuestran un pasado doloroso, lleva a mi imaginación miles de pesares, lleva a mi corazón una desagradable sensación. Mis ojos se humedecen, mi corazón tiembla ante este sentimiento, mi mente vuela con imágenes inventadas, un pelaje suave envuelve su cuerpo y yo puedo sentir como desprende un suave calor, un leve movimiento cardíaco que le permite continuar, una pequeña respiración. Aquellos ojos que provocan en mi tan variable sensación, presenta un aura de soledad, cubierta de tristeza y sufrimiento, se siente un corazón con esperanzas por un buen dueño, con esos sueños vivía cada día, a través de lluvia y diferentes ambientes paso, y su corazón ansioso aún estaba, nunca se rindió, en las noches soñaba con abrigo y amor. Aquél ser de ojos triste y hermoso pelaje blanco simplemente espero. Esperar no es malo, solo pocos llegan a lograrlo, todos siguen anhelando, esperar, y esperar, y que algún día se cumpla un deseo que en el fondo de cada corazón se desea con hacer realidad, era su vida, habrán sido meses, o simplemente días, rechazo hasta el momento la llenaba, no podía negarlo, no debía aceptarlo, porque sabía que lo que en su pequeña cabecita peluda pasaba, algún día sucedería. Y así paso el tiempo, paso la soledad, nadie comprendía que ella solo quería jugar, deseaba correr por el mar, poder cariño recibir, lamer la mano de su dueño soñado, cuidar de que ningún malvado se acerque demasiado. Una luz en su camino se cruzo, y de la soledad se alejo, su esperanza la salvo de aquel oscuro lugar, donde mas no podía recibir, ni tampoco mucho podía dar. Ahora solo tenía que expresar todo lo que podía dar, vueltas y ladridos lanzaba, esperando que alguien la adoptara, en aquel sitio que se encontraba, con cariño la trataban, pero ella sabía que ahí no se quedaría, y que alguien la iría a buscar para darle un verdadero hogar. Un día una joven la fue a ver, y con mucha amor la miro, ella dudo si fuera alguien que de verdad deseara con ella estar, pero a pesar de su dudar, la joven no se rindió, como recompensa ella la lamio, y la joven con una risa le contesto, su corazón feliz y lleno de sentimientos ahora estaba, pero la joven se fue, y de nuevo sola se quedo, ella hasta el final con la mirada la siguió, y vio como de a poco se fue, y la espalda le daba, ya fuera del portón la joven se encontraba, y la perra aun la observaba, e inesperadamente, la joven vuelta se dio y por unos segundos la admiro. No pasaron más de unos largos días, y volvió a viajar aquel ser de ojos tristes, pero ahora su viaje era el final, porque a la casa de su nueva dueña llego, y con la misma risa que con la que la conoció, la volvió a encontrar, y esta vez no se canso de lamerle la mano, para que nunca olvide que juntas estarán, hasta que ya no se pueda más. Así como esas fantasías que por su mente pasaban en los tiempos de soledad, ahora podía verlos como realidad, y los viajes a la playa, y las noches en la cama con su compañera, ahora sus ojos tristes no eran, y su pelaje más brillante que el sol estaba.
Camina, corre, observa, toca, ama, respira, has todo lo que puedas en un segundo. Simplemente disfruta. Todo lo que tu hagas es un fantástico cuento, todo lo que escribes en tu vida es un pequeño recuerdo.
lunes, 18 de octubre de 2010
miércoles, 6 de octubre de 2010
El gato de cola naranja.
Dicen que si uno se encuentra con el gato blanco de cola naranja tu vida cambiara, yo no soy supersticiosa y no creo que un gato me cambie la vida; aunque me he encontrado con gente que si cree en aquello. Como aquél capitán pirata, ése que no poseía barco, como olvidarme de él, viejo y con su pata de palo, bigote largo y aspecto harapiento, igual que los cuentos con su loro verde de brillante plumaje. Sí, aún me acuerdo de ese día, estaba en un muelle sentado solo frente al mar, lo mire por bastante rato preguntándome que estaría esperando, la duda me carcomió, y no pude evitar acercarme a él, estaba cerca para poder comenzar el diálogo, pero su mirada estaba perdida en algún lugar, en uno muy lejano al parecer, yo ya sumergiéndome en sus pensamientos, me lo imaginaba con 10 años menos, y con un barco que comandar, con una espada desvainada y en medio de una pelea por un botín espectacular. También lo logre ver en el momento en que un motín le hicieron, y sus mejores piratas lo traicionaban por unas monedas de oro para poder comprar una botella de ron al volver a la ciudad, la desilusión de ver que los que creía sus amigos lo traicionaban le había dejado marcas en su cara, señales de dolor, esas heridas que aunque cicatricen siempre van a estar. Pero ya no podía ver más historias de él, porque su mirada de un momento a otro se fijo en mí, y en mi ondeante vestido, y con cara de preocupación me observó y exclamó:
- Tu tienes mucha curiosidad muchacha, y este viejo sabe que muchas preguntas debes tener sobre este ser que observas, yo solo espero que mi barco vuelva, y que esos traidores mueran, pero no sucederá, porque años he esperado y nada ha pasado. Espero que llegue mi barco, o que algún día ése gato vuelva, ¡Oh, si señorita!, yo lo vi, tiempo atrás cuando soñaba con navegar, y no dudes de que lo que le pedí me cumplió. Tres días pasaron sin novedad, y al despertar del último lo volví a ver, me guió hasta un lugar desconocido y maravilloso, ahí me encontré sorprendido lo que siempre desee. Pero la gente me traicionó, y aquél barco que dominaba he perdido a malas ganas. Nunca lo volví a ver, se que él volverá.
Yo no lo podía creer, alguien me aseguraba que aquel gato si existía al parecer, yo como ingenua le conteste:
- Un sueño tuvo buen señor, descanse.
- Señorita usted algún día comprobara que si uno cree en aquellas cosas, le podrá pasar, pero es tarde ya, mejor váyase a su hogar.
- Razón tiene usted, que este bien.
Y partí a mi hogar tarde era, mi vida siguió y tres días después aquél viejo desapareció, y hasta ahora en el pueblo se habla del pirata, el barco, y aquél gato de cola naranja.
p.d: Mi primera publicación en el blog.
- Tu tienes mucha curiosidad muchacha, y este viejo sabe que muchas preguntas debes tener sobre este ser que observas, yo solo espero que mi barco vuelva, y que esos traidores mueran, pero no sucederá, porque años he esperado y nada ha pasado. Espero que llegue mi barco, o que algún día ése gato vuelva, ¡Oh, si señorita!, yo lo vi, tiempo atrás cuando soñaba con navegar, y no dudes de que lo que le pedí me cumplió. Tres días pasaron sin novedad, y al despertar del último lo volví a ver, me guió hasta un lugar desconocido y maravilloso, ahí me encontré sorprendido lo que siempre desee. Pero la gente me traicionó, y aquél barco que dominaba he perdido a malas ganas. Nunca lo volví a ver, se que él volverá.
Yo no lo podía creer, alguien me aseguraba que aquel gato si existía al parecer, yo como ingenua le conteste:
- Un sueño tuvo buen señor, descanse.
- Señorita usted algún día comprobara que si uno cree en aquellas cosas, le podrá pasar, pero es tarde ya, mejor váyase a su hogar.
- Razón tiene usted, que este bien.
Y partí a mi hogar tarde era, mi vida siguió y tres días después aquél viejo desapareció, y hasta ahora en el pueblo se habla del pirata, el barco, y aquél gato de cola naranja.
p.d: Mi primera publicación en el blog.
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